El CEO de Electronic Arts, Andrew Wilson, insinuó recientemente la exploración de la compañía en publicidad dinámica dentro de juegos AAA, señalando un posible cambio hacia contenido comercial más personalizado adaptado a los hábitos e intereses de los usuarios.
Andrew Wilson, CEO de Electronic Arts, recientemente reveló la consideración de la empresa de integrar publicidad dinámica en los videojuegos AAA. Si bien no es un concepto nuevo para Electronic Arts, ya que la empresa ha incluido anuncios del mundo real en sus juegos durante aproximadamente dos décadas, este último movimiento se centra en lo que se conoce como 'DAI' – Inserción Dinámica de Anuncios, un método más sofisticado para ofrecer contenido comercial adaptado a los hábitos, historial e intereses de los usuarios.
¿Una nueva frontera o invasión de la privacidad?
Durante una reciente llamada de ganancias, Wilson discutió la implementación potencial de publicidad dinámica dentro de los videojuegos AAA, aunque sin especificar qué juegos estarían involucrados:
"La publicidad presenta una oportunidad de crecimiento significativa para nosotros. Actualmente, tenemos equipos internos explorando integraciones consideradas dentro de nuestras experiencias de juego."
Tradicionalmente, la inclusión de anuncios en juegos ha generado controversia dentro de la industria. Ejemplos recientes de anuncios 'invasivos' en ciertas plataformas han generado críticas, especialmente los comerciales repentinos a pantalla completa que molestan a los jugadores. Por lo general, los anuncios en el juego se limitan a vallas publicitarias, carteles y colocaciones de productos.
Sin embargo, con la sofisticación del DAI, los jugadores pronto podrían encontrar anuncios dirigidos dentro de sus experiencias de juego. Algunos ven esto como una evolución natural de la industria, ya que los ingresos por publicidad representan una fuente de ingresos importante para muchos sectores, ofreciendo otra vía para que editores y desarrolladores aumenten sus ganancias.
El artículo original fue escrito por Johanna Goebel.